Ahí va...
- Arias! Saca la dulzaina y tocamos un rato!
- Ahora? Pero que va a empezar la diana en un rato.
- Cagüen la leche, que ahora con las chuletillas y el vinito apetece!
Más o menos de esta manera se prendió la mecha de los Encuentros de Dulzaina de Urueñas. Era el sábado de las fiestas de Septiembre de 2011 y estábamos almorzando en la parilla de La Fuente unos cuántos de la cuadrilla. Había ganas de tocar la dulzaina y la caja y los ánimos estaban templados con ese contento que “te sale solo” cuando disfrutas de las fiestas de tu pueblo; pero quizá no era el momento más adecuado para armar jaleo con la procesión de la misa tan próxima. Así fue cómo se nos ocurrió la idea de los encuentros…, juntarnos un día con amigos, para almorzar y tocar porqué sí, porque nos gusta y porque nos divierte. De hecho, el leitmotiv de los encuentros no es otro que De la Panza sale la Danza.Tras esta idea inicial pensamos que lo mejor era esperar al buen tiempo de la primavera para empezar a mover el asunto. Y llegando la primavera fue cuando vimos que la iniciativa del Ayuntamiento de organizar un Cocido Popular era el día perfecto para organizar el evento. Sería el 5 de Mayo. Ese día habría gente en el pueblo gracias al cocido y además, con el ambiente de las dulzainas, seguro que alguno terminaba de decidirse y se animaba también a acercarse por Urueñas.
Nos pusimos en marcha pues. El Ayuntamiento colaboraría invitando a un plato de cocido a cada músico, Kinito pondría los cafés, Los Fitis invitarían al almuerzo y prepararían camisetas conmemorativas, la ACAU colaboraría con el local, los hielos y una de las cámaras para enfrescar las bebidas desde la noche anterior.
Una vez tenido claro qué ofrecer a los músicos, cada uno fuimos invitando a nuestros amiguetes para venir a tocar ese día... y no faltó gente!
De parte de Arias vinieron Tito, David y Mar (Cerezo y Mansilla). Del Valle de Tabladillo invitados por Alberto vinieron Yasmina y el Abuelo Paco. De Aranda de Duero el Txasca se trajo a sus compañeros de La Peña El Jarro. Jorge se trajo al Jevi, al Tito y demás gente de Carrascal del Río. De parte de Moni y de la mía se animaron a venir las chicas y chicos de la Asociación Magerit Dulzaina Viva de Madrid. Y por supuesto Los Fitis, que siempre están presentes a la hora de animar el cotarro.
En total más de 30 músicos y danzantes que se acercarían por Urueñas con la sana intención de pasar un buen día entre bailes y dulzainas, a cambio de un plato de cocido.
Cuando ya se iba acercando el día, empezamos a ultimar los preparativos... ya estaba listo el cartel, las camisetas, las compras del almuerzo en marcha. De esto último se encargaba Txasca así que nadie se quedaría con hambre, de eso no habría que preocuparse. De lo que si nos preocupábamos, y cada vez mas era del cielo. Cada vez que mirábamos para arriba y veíamos nubes nos echábamos a temblar. Las previsiones no eran nada halagüeñas, habría lluvias a lo largo del día. Esto era casi lo único que no se podía controlar y no pintaba nada bien. Tanto la organización del cocido como la de los encuentros de dulzaina se pensaron desde el principio para disfrutarse en la calle, pero las circunstancias apuntaban a tener que cambiar drásticamente de planes.
La mañana amaneció con cielo azul, pero según se acercaban las 11 de la mañana, hora de empezar con el pasacalles, el cielo empezó a cubrirse, y justo cuando empezamos a tocar...comenzó a chispear...y luego a llover... El pasacalles al final parecía una carrera de Formula 1 por las calles de Urueñas en busca de refugio.
Una de las ideas que salvaron el evento fue la decisión de Jorge de preparar el almuerzo en su cochera, ya que debido a la lluvia, hacerlo en la calle estaba totalmente descartado. El Ayuntamiento nos llegó a ofrecer hasta el salón de plenos, pero finalmente la idea de la cochera fue la mejor. Allí comimos, bebimos, tocamos y bailamos todo lo que quisimos y más. Jotas, panceta, rumbas, chorizo, pasodobles, morcilla, cervezas y clarete... no faltó de ná.
Aprovechando un claro en el cielo bajamos a la plaza en pasacalles para amenizar el vermú mientras se terminaba de preparar el cocido en el local de la Asociación. El tiempo parecía que aguantaba mientras se esperaba en la cola del cocido. He de decir que como el cocido que prepara mi madre no hay nada, pero el de ese día estuvo realmente rico, sí señor.
Después de comer subimos de nuevo a la plaza para continuar con el postre de los encuentros. Aquí de nuevo la lluvia se hizo notar y no se veía momento de rematar la función. Con la ilusión y esfuerzo con que todos habíamos preparado esto, la cosa merecía otro final. Pero el tiempo mejoró y permitió acabar felizmente la jornada. Uno a uno los distintos grupos fueron interpretando un par de temas para el agradecido público mientras los más animados vencían a la digestión del cocido a base de jotas y pasodobles.
Por último los Fitis pusieron su "toque" y cerraron oficialmente los encuentros. Y digo oficialmente, porque extraoficialmente, no faltó música hasta bien entrada la madrugada.
Como resumen he de decir que a pesar del mal tiempo, el resultado de los Encuentros fue más que bueno. Todos los músicos y participantes se lo habían pasado en grande y habían disfrutado del día. Esto anima enormemente y justifica la intención de celebrar algo similar para el año que viene, si con mal tiempo la cosa salió así de bien...os imagináis como sería con buen tiempo? ¡El año que viene lo veremos!
Por último os dejo unos cuantos enlaces para que veais lo bien que nos lo pasamos...
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